La rápida adopción de las tecnologías digitales sigue remodelando un sector tras otro. La era de la transformación digital estaba muy avanzada antes de que llegara la pandemia del COVID-19 y cambiara fundamentalmente la forma en que funciona el mundo. Sin embargo, según una encuesta reciente de McKinseylas respuestas a COVID-19 han acelerado la adopción de las tecnologías digitales en varios años.
La escasez de desarrolladores profesionales y la sobrecarga de los departamentos de TI han contribuido al auge de los "desarrolladores ciudadanos", usuarios no técnicos que aprovechan plataformas innovadoras y fáciles de usar para crear aplicaciones y automatizar procesos. A la hora de elegir una plataforma de automatización de procesos, las organizaciones pueden elegir entre no-code y low-code.
A primera vista, la distinción entre no-code y low-code no está del todo clara. Los vendedores suelen utilizar los términos de forma indistinta y suelen promocionar nuevas funciones que difuminan la línea entre ambas tecnologías. Dejando a un lado la confusión general del mercado, hay diferencias muy reales y significativas entre las plataformas sin código y de bajo código.
A nivel conceptual, las diferencias se reducen en gran medida a cómo se utilizan las tecnologías, para qué se utilizan y quién las utiliza. Elegir la plataforma de automatización de procesos adecuada implica comprender estas distinciones, definir sus objetivos, determinar el papel que desempeñarán los desarrolladores ciudadanos en el avance de las iniciativas de transformación digital y aplicar una estrategia de gobernanza eficaz para garantizar el éxito.
No-code y Low-code: Una breve historia
Aunque las plataformas sin código y de bajo código han proliferado en los últimos años, sus raíces se remontan al menos a 1982. Ese fue el año en que el autor James Martin publicó su libro titulado Desarrollo de aplicaciones sin programadores. En su libro, Martin escribió que "el número de programadores disponibles por ordenador se está reduciendo tan rápidamente que la mayoría de los ordenadores del futuro deberán trabajar, al menos en parte, sin programadores".
Según Martin, algunos usuarios finales eran capaces de crear sus propias aplicaciones utilizando lenguajes de programación de cuarta generación (4GL). Sin embargo, los 4GL no estaban a la altura por varias razones. En primer lugar, no admitían las mejores prácticas de desarrollo habituales. En segundo lugar, las tecnologías 4GL ofrecían un número limitado de bibliotecas. Los desarrolladores utilizan las bibliotecas para realizar tareas sencillas como la lectura de documentos XML. En tercer lugar, las aplicaciones creadas por usuarios no técnicos generaban problemas de seguridad y gobernanza. Por último, las tecnologías 4GL no se adaptaban bien, ya que era difícil introducir cambios.
Así que, aunque la premonición de Martin resultó ser cierta, el momento con respecto a la tecnología requerida para permitir a los usuarios no técnicos crear aplicaciones estaba equivocado. Varias décadas de innovación tecnológica llevaron a la aparición de soluciones que superaban las limitaciones de los 4GL: plataformas sin código y de bajo código.
Plataformas sin código frente a las de bajo código
Tanto las plataformas sin código como las de bajo código ofrecen herramientas innovadoras y fáciles de usar que permiten a los desarrolladores ciudadanos avanzar en la automatización de procesos dentro de una organización. La elección de la plataforma adecuada para su organización depende de lo que espera lograr y de quién será responsable de realizar el trabajo.
Las plataformas sin código son ideales para desarrollar aplicaciones sencillas. Su uso final se limita normalmente al nivel individual o de grupo de trabajo. Por ejemplo, un autónomo que quiera crear un formulario de envío en su sitio web podría utilizar una herramienta sin código. Del mismo modo, una pequeña empresa que carece de recursos para la supervisión interna de TI y requiere aplicaciones sencillas de cara al cliente podría beneficiarse de una plataforma sin código.
Las plataformas de bajo código son adecuadas para organizaciones que necesitan crear aplicaciones o procesos más complejos. Estas organizaciones cuentan con profesionales de TI designados que pueden supervisar las iniciativas de desarrollo ciudadano. Además, los desarrolladores profesionales aprovechan las plataformas de bajo código para eliminar las tareas de codificación manual que consumen mucho tiempo y son repetitivas, lo que les permite centrarse en los aspectos de mayor valor de la programación.
Al aprovechar una plataforma de bajo código, las organizaciones pueden escalar y avanzar en sus iniciativas de transformación digital.
Plataformas sin código
Las plataformas sin código están destinadas a los usuarios empresariales. Ayudan a los usuarios no técnicos a sustituir los casos de negocio elementales o los procesos manuales que no requieren la integración con 3rd sistemas de terceros. Las herramientas sin código son, por tanto, ideales para los usuarios que necesitan una aplicación sencilla para resolver un único caso de negocio sin tener que esperar varios meses o más a que los departamentos de TI la desarrollen.
En las plataformas tradicionales de desarrollo de software, el "código" es el conjunto de instrucciones que indican a la plataforma cómo realizar una acción. Sin embargo, con una plataforma sin código, el usuario especifica lo que hace la aplicación, eliminando la necesidad de definir el cómo. La mayoría de las plataformas sin código funcionan en un sistema cerrado. Esto significa que los usuarios no pueden introducir código personalizado para cambiar el funcionamiento de la plataforma.
Las plataformas sin código suelen basarse en una interfaz de usuario preestablecida. Esta capa simplifica y agiliza el proceso de diseño mediante elementos visuales fáciles de usar. Por ejemplo, la función de arrastrar y soltar, que permite a los usuarios crear interfaces de usuario ricas en funciones arrastrando y ordenando elementos del código existente sin necesidad o capacidad de introducir manualmente código personalizado.
Plataformas de bajo código
Las plataformas de bajo código son herramientas que permiten tanto a los usuarios con poca experiencia en programación como a los desarrolladores profesionales crear aplicaciones de forma más rápida y sencilla. A diferencia de las plataformas sin código, con las herramientas de bajo código los usuarios pueden añadir código personalizado que lo hace aplicable a más casos de uso, así como integrar fácilmente las aplicaciones con soluciones de terceros.
Al igual que las herramientas sin código, las plataformas de bajo código proporcionan un entorno de desarrollo visual integrado que facilita la creación de aplicaciones. Sin embargo, con las plataformas de bajo código, los desarrolladores pueden crear e implementar código personalizado para desplegar funciones que no están fácilmente disponibles. Esta funcionalidad hace que las plataformas de bajo código sean más adecuadas para procesos empresariales complejos, especialmente los que requieren la integración con otras aplicaciones o sistemas.
Forrester Research acuñó el término "low-code" en 2014 y lo definió como:
"Las plataformas de bajo código emplean técnicas visuales y declarativas en lugar de las tradicionales líneas de programación. Tanto los desarrolladores como los no desarrolladores pueden utilizar estos productos, y requieren menos formación para empezar. Entre sus características más comunes están los componentes reutilizables, las herramientas de arrastrar y soltar y el modelado de procesos. Los individuos o los equipos pequeños pueden experimentar, crear prototipos y entregar aplicaciones en días o semanas".
Según Forresterlas plataformas de bajo código tienen el potencial de hacer el proceso de desarrollo de software hasta 10 veces más rápido que los métodos de desarrollo tradicionales. Además, las plataformas de bajo código desempeñan un papel integral en el avance de las iniciativas de digitalización de las organizaciones de varias maneras:
- Reducción del tiempo necesario para cumplir los requisitos de la empresa. Un desarrollo más rápido permite a los equipos centrarse más en el diseño.
- Dominio de la TI en la sombra. La TI en la sombra - los proyectos que se gestionan sin la supervisión del departamento de TI de una organización, pueden dar lugar a actividades de TI perjudiciales. Sin embargo, una plataforma de código reducido combinada con una estrategia de gobernanza eficaz elimina los problemas de la TI en la sombra.
- Automatización de los procesos operativos. Una plataforma de bajo código con capacidades de gestión de procesos empresariales (BPM) facilita la automatización de tareas en toda una organización.
El auge del "ciudadano desarrollador"
"Un desarrollador ciudadano es un usuario que crea nuevas aplicaciones empresariales para que las consuman otros utilizando entornos de desarrollo y ejecución autorizados por el departamento de TI de la empresa". - Gartner
A medida que las organizaciones aceleran sus iniciativas de transformación digital, los departamentos de TI se esfuerzan por mantener el ritmo de la creciente demanda de nuevas aplicaciones. IDC estima que se desarrollarán más de 500 millones de aplicaciones para 2023. Para superar la brecha de habilidades de TI, las organizaciones están recurriendo a los desarrolladores ciudadanos para entregar aplicaciones más rápidamente utilizando menos recursos.
Según una encuesta de Gartner sobre desarrollo ciudadano, el 41% de los encuestados indicaron que tienen iniciativas de desarrollo ciudadano activas. Otro 20% de los que no las tienen están en proceso de evaluación o planean poner en marcha iniciativas de desarrollo ciudadano. Por otra parte, en una encuesta de Gartner sobre las TI de las unidades de negocio, el 46% de los encuestados indicaron que el aumento del gasto en TI dirigido por la empresa se debía al incremento del desarrollo de software, aplicaciones o bases de datos.
Con la proliferación de plataformas sin código y de bajo código, cualquiera puede ser desarrollador. Gartner prevé que el número de desarrolladores ciudadanos activos en las grandes empresas será al menos cuatro veces superior al de los desarrolladores profesionales en 2023. El rápido crecimiento de los desarrolladores ciudadanos, combinado con la disponibilidad de innovadoras plataformas sin código y de bajo código, ofrece a las organizaciones enormes beneficios en términos de costes.
En primer lugar, los desarrolladores ciudadanos que desempeñan varios sombreros dentro de una organización son mucho más rentables que los costosos desarrolladores profesionales. En segundo lugar, la implementación de herramientas sin código y de bajo código ayuda a las organizaciones a escalar sus iniciativas de transformación digital, lo que es vital para mantener una ventaja competitiva en la nueva economía.
En tercer lugar, las plataformas de bajo código y sin código fomentan una mayor colaboración dentro de una organización. Las herramientas de desarrollo fáciles de usar y flexibles ayudan a los usuarios de la empresa y a los departamentos de TI a colaborar y crear nuevas aplicaciones juntos. En cuarto lugar, incluir a los desarrolladores ciudadanos en el proceso de desarrollo contribuye a alinear los objetivos empresariales con los sistemas de TI. Por último, las plataformas sin código y de bajo código aceleran el proceso de desarrollo, aumentando la productividad y permitiendo a los equipos de TI dedicar tiempo a tareas de mayor valor.
La necesidad de gobernar
Con el aumento de la dependencia de los ciudadanos desarrolladores, es crucial que las organizaciones apliquen un sistema de gobernanza que incluya la supervisión de las TI. Una encuesta realizada en los últimos años por Gartner, Citizen Development is Happening and IT Needs to be More Engagedha descubierto que:
- Sólo el 16% de los encuestados afirma que las TI participan plenamente en el desarrollo de los ciudadanos.
- El 36% de las organizaciones informaron de que el departamento de TI proporcionaba principalmente apoyo al desarrollo por parte de los usuarios de la empresa.
- La supervisión y la gobernanza de las iniciativas de desarrollo de los ciudadanos por parte de las tecnologías de la información son muy deficientes, y se necesita una gobernanza.
Se necesita un sistema de gobernanza del desarrollador ciudadano para evitar actividades informáticas perjudiciales. Las actividades perjudiciales se presentan de diferentes formas. Los problemas de seguridad y cumplimiento son los más importantes. Por ejemplo, un desarrollador ciudadano puede decidir utilizar una biblioteca de código abierto en contra de las normas internas. Esto podría permitir el acceso a datos sensibles por parte de terceros no autorizados.
La pérdida de datos es otro riesgo común. Los sistemas y aplicaciones que se implantan sin supervisión no forman parte de la estrategia de copia de seguridad y restauración del departamento de TI. Un incidente podría provocar la pérdida de datos críticos. Las acciones de los desarrolladores ciudadanos también pueden dar lugar a ineficiencias. Una solución diseñada para mejorar un proceso individual podría afectar negativamente a los procesos relacionados. Sólo los equipos de TI tienen la capacidad de supervisar el rendimiento del sistema en toda la organización.
Un marco para una estrategia de gobernanza eficaz
Una estrategia eficaz de gobernanza del desarrollo de los ciudadanos debería incorporar un marco similar al siguiente.
Paso 1: perfile su estrategia
Empiece por escribir sus objetivos. ¿Qué quiere conseguir con los desarrolladores ciudadanos? Definir sus objetivos también ayuda a educar a los principales interesados en la importancia de las iniciativas de desarrollo ciudadano para aumentar la aceptación en toda la organización. Una vez definidos los objetivos, Forrester aconseja responder a las siguientes preguntas para formar la base de su estrategia de gobierno.
- ¿Quiénes son los desarrolladores ciudadanos? Identifica a tus desarrolladores ciudadanos y asegúrate de que entienden lo que se espera de ellos y dales las herramientas que necesitan para tener éxito.
- ¿Dónde van a operar? Las organizaciones suelen empezar a pequeña escala antes de implantar el desarrollo ciudadano en toda la organización.
- ¿Cómo se desarrollarán las aplicaciones? Todas las aplicaciones deben crearse en una única plataforma unificada y de acuerdo con los flujos de trabajo existentes para garantizar la eficiencia.
- ¿Cuándo se entregarán las aplicaciones? Determine cómo los desarrolladores ciudadanos priorizarán qué aplicaciones se construyen y cómo distribuirán su tiempo entre el desarrollo y otras funciones dentro de la organización.
- ¿Qué tipo de aplicaciones van a construir? Las organizaciones suelen delegar el trabajo en función de parámetros predefinidos, como la clase o el uso final.
Paso 2: Crear un equipo de gobierno
Las organizaciones deben designar equipos multidisciplinares que colaboren estrechamente con las TI. El equipo de gobernanza es responsable de mantener las políticas de desarrollo ciudadano, proporcionar recursos, gestionar las plataformas que utilizan los desarrolladores ciudadanos y mantener informados a los principales interesados sobre el estado del programa.
Paso 3: Proporcionar herramientas y apoyo
Las herramientas adecuadas son fundamentales para una gobernanza eficaz. Las plataformas sin código y de bajo código proporcionan un entorno gestionado que mitiga el riesgo de actividades informáticas perjudiciales. Los desarrolladores ciudadanos deben saber dónde acudir para obtener asistencia técnica.
Paso 4: Formar a los ciudadanos desarrolladores
Los desarrolladores ciudadanos deben aprender los conceptos básicos y cómo utilizar la plataforma. Las organizaciones deben exigir que los desarrolladores ciudadanos pasen una evaluación antes de que se les conceda acceso al sistema. La formación continua debe proporcionar a los desarrolladores ciudadanos oportunidades para aprender nuevas habilidades.
Paso 5: abordar los riesgos de seguridad
Una gobernanza eficaz combinada con el uso de una plataforma de código reducido puede mitigar los riesgos de seguridad. Deben establecerse procedimientos para garantizar que toda la actividad de los desarrolladores ciudadanos se registre, se supervise y se someta a normas de control de calidad.
La creación y aplicación de una estrategia de gobernanza es un componente complejo pero necesario para el éxito de un programa de desarrollo ciudadano. Al igual que ocurre con la integración de cualquier política nueva, hay que contar con algunos problemas de crecimiento y estar preparado para revisar y mejorar la estrategia según las circunstancias.
Resumen
La insaciable demanda de tecnologías digitales ha sobrecargado a los equipos de TI y ha contribuido al aumento de los desarrolladores ciudadanos. Los usuarios empresariales aprovechan las plataformas de bajo código para crear aplicaciones sencillas. Las plataformas de bajo código ofrecen tanto a los usuarios empresariales que operan bajo la supervisión de los profesionales de TI como a los desarrolladores la capacidad de crear aplicaciones complejas, automatizar procesos empresariales completos y avanzar en la transformación digital en toda la organización.
Acerca de ProcessMaker
ProcessMaker es un software de flujo de trabajo y BPM de bajo código. ProcessMaker facilita tanto a los usuarios de negocios como a los desarrolladores profesionales la automatización de complejos procesos de negocios. Con sede en Durham, Carolina del Norte, en los Estados Unidos, ProcessMaker cuenta con una red de socios repartidos en 35 países de los cinco continentes. Cientos de clientes comerciales, entre ellos muchas empresas de la lista Fortune 100, confían en ProcessMaker para transformar digitalmente sus principales procesos de negocio, permitiendo una toma de decisiones más rápida, un mejor cumplimiento y un mayor rendimiento.