Lo creas o no, para lanzar un simple procesador de textos, solías tener que escribir un comando. Empezaba algo así:
C:\
Ahora, estamos tan acostumbrados a hacer clic y tocar iconos de colores para hacer el trabajo. Para muchos de nosotros, el concepto de controlar nuestros ordenadores con largas cadenas de comandos parece medieval.
La premisa se ha trasladado a todos los aspectos de la informática, enmascarando el código con una apariencia más atractiva y fácil de usar. A través del megáfono de la mercadotecnia, ahora lo conocemos como "no-código", un término que es polarizante si se toma al pie de la letra. ¿Por qué? Algunos escépticos creen que el "no-código" sugiere el fin de los días para los codificadores.
Esto no podría estar más lejos de la realidad: el "no-código" no destierra el código, sino que simplemente permite a los usuarios realizar acciones mediante atractivos elementos visuales. Las plataformas sin código convierten JavaScript, C e incluso lenguajes de marcado como HTML en botones que podemos pulsar y bloques que podemos arrastrar y soltar. Pero detrás de la cortina todavía se agitan los lenguajes de programación tradicionales; sólo están fuera de la vista del usuario típico.
Cómo el no-código está transformando todas las industrias
En esencia, las aplicaciones sin código democratizan el desarrollo de software para que todo el mundo pueda colaborar más fácilmente. Al igual que sus homólogas de bajo códigoestas aplicaciones fáciles de usar rompen las barreras de entrada y son cada vez más comunes en todas las industrias:
- Los vendedores y los usuarios habituales de las redes sociales pueden diseñar gráficos llamativos y de aspecto profesional en Canva, un ejercicio que solía requerir al menos conocimientos elementales de PhotoShop.
- ¿Estás interesado en abrir una tienda online? Regístrate en una cuenta de Shopify y podrás crear un bonito escaparate en pocos días.
- ¿Quieres probar a diseñar un videojuego? A principios de este año, Nintendo lanzó Game Builder Garage, donde los jugadores pueden arrastrar y soltar elementos y conectar una amplia biblioteca de acciones para programar su propio juego.
- Las plataformas más complejas de flujo de trabajo sin código, o de bajo código, como ProcessMaker, invitan a los usuarios empresariales a hacer clic y deslizar bloques que activan conectores API, solicitudes de firmas seguras, cargas de fotos, validadores de datos, etc.
No-code da la bienvenida a los no programadores con interfaces mucho menos intimidantes. Transforman cientos de líneas de código en un ejercicio que refleja lo fácil que es poner una transición de desvanecimiento en una presentación de PowerPoint o añadir una imagen en un constructor de campañas de correo electrónico.
Desmontando 2 mitos comunes sobre el no-código
¿Dudas sobre cómo puede encajar el no-código en tu ciclo de desarrollo? Vamos a desmentir dos mitos comunes sobre el uso del no-código.
Mito nº 1: Los desarrolladores profesionales no necesitan componentes sin código
Los equipos de TI y de desarrollo de software se llevan la peor parte de la revolución digital. Sus colas de proyectos están más apiladas que nunca, desde la construcción y el mantenimiento de complejas bases de datos hasta tareas menores como añadir un campo de entrada a los formularios de envío online.
Las herramientas sin código pueden ayudar a los desarrolladores a completar los tickets 2-3 veces más rápido que los métodos tradicionales de codificación. Además, los responsables de marketing, los ejecutivos de RRHH y los equipos de ventas pueden encargarse de las tareas más suaves, permitiendo a los programadores más avanzados centrarse en proyectos complejos.
Mito #2: El no-código elimina la necesidad de desarrolladores
Con una plataforma sin código, el creador del software define lo que el usuario puede y no puede conseguir. En cambio, un programador experto puede crear cualquier cosa desde el principio. Las organizaciones siguen teniendo peticiones ad-hoc y necesidades de personalización que sólo un programador capacitado puede satisfacer. Para la mayoría de las empresas, las soluciones de bajo código serán más flexibles.
El "código" no va a ninguna parte. Las plataformas de no-código y de bajo código simplemente pintan una capa gráfica sobre los lenguajes de programación que solían ser un obstáculo para la creación de software y otros activos digitales. Al dar la bienvenida al no-código en su cartera de software, puede abrir nuevas oportunidades para su organización en su conjunto.